HOY SERÁ EL DÍA DECIMOSEXTO
de un mes de un año de un siglo
de una era y aquí sigue esta lluvia
de coprolitos
que se parece tanto a una partitura
de canto gregoriano cabras
del santo cristo la condición humana
es un prisma deslenguado
un monopolio de símbolos
algunos edulcorantes
y mucho pánico al azucar.
Amigo Manuel, al decimosexto sigue el decimoséptimo y los días van trascurriendo, la lluvia de coprolitos persiste como el giro de la noria del tiempo. Las Horas (Eirene, Eunomia y Dice) siguen dándole vueltas, viendo como nosotros giramos con ella y cuando quieren cortan el hilo que nos une a esa rueda.
ResponderEliminarSalud
Cómo haremos, querido Francesc, como decía Juan Ramón Jiménez, para salir de esta rueda apresurada:
Eliminar¡Qué difícil entrar
cada segundo, en esta ruedecilla
rápida, leve, que ardería en prisa,
la rueda grande, lenta, que yo ansío
en cuya vuelta cabe el universo!
Salud, un abrazo.