una estrella de nervios que no tiene piedad
Blanca Andreu
Tuve alas oscuras
en los días de mayo
adolescente impuro, sobre la nieve amarga
me desaté las arterias contra tu piel tan leve...
y coroné de lluvia la sucia paloma de la sangre
como un satán payaso,
equilibrista,
derroté la cruz con pan de lunas.
Eran los autobuses de cartón,
las flores de aluminio,
todo estaba por nombrar.
La angustia tomaba el sol,
su cuerpo cenital, opio
de melancolía.
La luz vendrá de un tiempo derrotado,
tendrá nervios de estrella, memoria;
si pudiera decir el hombre lo que odia
con la misma fuerza que lo que ama.
Muy bien Manuel, es un poema muy bello. Me gustaría que fuera un poco más largo.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
Salud Francesc, no sé si podré satisfacerte, buen amigo, a no ser que se deje hacer una segunda parte.
ResponderEliminarNo sé si se podría ensayar un verso más largo o convertir algún adjetivo en una frase que fundiera un elemento físico con algo que no tuviera materia. No sé Manuel, ya sabes aque no debes hacerme demasido caso. El poema está bien, pero siempre acabas pidiendo más.
EliminarSalud
Muy bien, Manuel. "verrà la morte e avrà i tuoi occhi"
EliminarSalud