Anárquico y liberal
La amorcracia cultiva patatas sin mancharse. Es el poema ecológico idealista, o hipocondria obtusa de la razón gesticulando un teatro de supuestas bondades, un nuevo orden mundial del hombre masa optimizado por la cultura, a la categoría del mejor. Aspiro ahora el calor dulce de la noche, manso como un tigre que acaricia a Borges. Me hundo en un clamor de espejos mientras me llegan unas vagas noticias del televisor; una secta llamada virginiana, capta adeptos en El Escorial. Centrado en el poso incólume del tiempo, quieto, sin atender ninguna cosa, me extiendo hacia el deseo musitado por tu piel, que rie mientras callas. Y pienso, que no quiero ninguna otra religión que la superficie asible de tu alma, que llamo cuerpo por pudor.
Manuel, hay que tener cierta prevención ante los espejos, pueden reflejarnos imágenes caprichosas o equívocas. Los espejos caprichosos son cuatro:
ResponderEliminar1) El espejo perverso que tiene la propiedad de mostrar las imágenes trastocadas por el odio o la mala baba. Es el espejo que nos enseña las verdades deformadas por las palabras afiladas. Es espejo cruel que hay que mirar con prevención y no dejar que nos deslumbre con el azogue de su cara oculta.
2) El espejo del tiempo que nos muestra el paso de los equinoccios que todo lo transforma. Es un espejo que se mueve con el transcurrir de los días y nos va mostrando cómo se deforma la piel y cómo se marchita la flor más galana.
3) El espejo roto que refleja en cada uno de sus pedacitos un rayo diferente de la luz. Son facetas de un poliedro perdido o las celdas del ojo de la mosca que todas juntas te enseñan la partitura completa.
4) Los espejos curvados, los de superficie cuadrática, que deforman las imágenes de manera disparatada. Este gran disparate de la poesía.
Salud
Francesc, no me son ajenos desde luego. Le incluiría además el espejismo, infame este, pues su efecto no desaparece hasta que la fuente del deseo no se colma de la espectativa que se vera truncada. Los espejos están cautivos de la belleza que reflejan, y desde este punto de vista, son perfectamente inofensivos, pero tendré cuidado.
EliminarSalud
Manuel
La última frase ...
ResponderEliminar"Y pienso, que no quiero ninguna otra religión
que la superficie asible de tu alma, que llamo
cuerpo por pudor." ...
Gracias, maestro.
Gracias a ti, querido amigo, en la superficie de la piel habita el alma, en ese espejo podemos mirarnos sin miedo a perdernos, estamos en buenas manos.
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